Resulta que anoche tuve un sueño bastante extraño: yo trabajaba en una clínica de varios pisos, un paciente entró a mi consultorio pidiendo que le transcribiera una incapacidad que otro medico le extendió para hacerle un favor: se había ganado la lotería y necesitaba ir a pedir el premio, yo hice caso omiso a sus explicaciones, la transcribí porque estaba mal hecha y ya la tenía, si la merecía o no, no me importaba (en la vida real no lo hubiera hecho), cuando salió pensé: quien quita y este tipo me tira algo por el favor (que horror ese pensamiento).
El mismo día entró el señor y me dio $500000, por el favor, yo estaba feliz contando los billeticos de $50000 cuando entró un tipo ahí, no se quien ahora que estoy despierta pero en el sueño como que si sabia y era alguien importante, me acusaba de cohecho y de corrupta, me pidió que subiéramos a la azotea para que la gente no oyera lo que me tenía que decir.
Al subir gritaba y gritaba, amenazando con contarle a mis superiores y pedir que me despidieran, ya me estaba asustando e intentaba buscar en mi cabeza una explicación, pero no encontraba ninguna, cuando el tipo cae al suelo con una flecha atravezada en el pecho, levanto la mirada y veo el cielo lleno de dragones (iguales a los de la mitología cristiana, no china) lanzando flechas, salí corriendo por la escalera, pero no le avisé a nadie, ni que el man estaba muerto, ni como se murió, ni del peligro que había afuera (que mala, ah?).
Entonces ya en el consultorio otra vez yo no era ni mujer ni medica del trabajo, sino un varón, cirujano cardiotoracico (como Burke en grey´s anatomy), me iba a ir a otra clínica más importante, y hasta ahí yo misma creía que a trabajar, al llegar el director de la otra clínica a buscarme me dijo algo de lo avanzada que estaba la cirugía de tórax en su institucion, y yo para mi propia sorpresa le dije subiendome la camisa hasta un poco por debajo del ombligo: si, me pueden operar con esa técnica nueva y dejar la cicatriz debajo del abdomen para que no se note, parece que tenia una masa intratoracica que me estaba matando y aun así pensaba en la cicatriz, que hueva.. al final me desperté, y no supe si morí o no, o si me quedó la cicatriz o no, o si los dragones seguían afuera.
Tenia rato que no tenía un sueño tan loco..
Imagenes tomadas de eurocopa.com
Definitivamente no es justo madrugar el 
